He visto por dentro a la máquina despachadora (o expendedora o surtidora) de café. Tiene sus depósitos de polvo de cada sabor de café, debidamente etiquetados, y tiene un garrafón de agua en la parte de abajo, conectado por un tubo hacia arriba, donde se mezcla con los polvos. Es el meollo de la magia.
Las máquinas me parecen interesantísimas. Los procesos de automatización me sorprenden igual que cuando, de niña, descubrí la idea de la máquina de movimiento perpetuo.
Silvia Parque
También me llaman la atención las máquinas. Sobre todo cómo la mente humana ha sido capaz de engendrar, crear e idear tales sistemas.
ResponderEliminarY la de café, brillante, y adictiva para fanáticos de un buen cortado, capuccino o mokaccino, por ejemplo ;)
Saludos!
Una maravilla, las posibilidades de la creación humana. Y sí, la máquina de café es tal como dices "brillante, y adictiva" :)
Eliminar¡Saludos!