martes, 2 de abril de 2013

Gracias, cuerpo

El cuerpo sabe mejor que la persona lo que conviene y lo que no conviene. Sabe cuántas horas necesita dormir, cuánto y qué comer, qué ejercicios y con qué intensidad. Solamente hace falta saber escucharlo. Y hacemos tanto ruido que es difícil escucharlo, o lo hacemos callar con artificios.

Creo que lo bueno sería entendernos como la unidad que somos, indivisible, de cuerpo y "alma"; pero para efectos prácticos, para los que llevamos arrastrando la materia de "educación física" no de la escuela sino de la vida, resulta útil entender al cuerpo un poco "separadamente", de manera que sea posible pensar en él como una entidad viva respetable a la que se agradecen los servicios que presta.

Silvia Parque

2 comentarios:

  1. No solemos hacerle caso, y en ocasiones ni siquiera podemos, pot falta de tiempo, y así nos va.
    Besitos

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    1. Aunque también tengo la impresión, muchas veces, de que no puedo hacerle caso a mi cuerpo, creo que es solamente una impresión, que si fuera mi prioridad -y sería lo mejor que lo fuera-, entonces encontraría el modo de hacerle caso.
      ¡Besos!

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