Tuve una infección en la garganta. Creo que ya pasó porque hoy termina el tratamiento (antibiótico), pero todavía no me siento bien-bien. Al principio, creí que estaba pagando por una noche de desvelo; sin embargo, al día dos de sentirme mal, me di cuenta de que era el malestar de enfermedad. Eran los días de mi menstruación, que nunca me da mucha lata, pero seguro colaboró para noquearme. Además, ya había iniciado el calor y a mí el calor me afecta la presión.
Gracias al ibuprofeno y a la amoxicilina, fui medio pudiendo con la vida -tengo mucho trabajo atrasado-; pero entre una cosa y otra, no compré sertralina a tiempo y llevo unos diez días sin ella. NO DEBO QUEDARME SIN SERTRALINA. Ya le he dicho a mi hija que le cambiaré a su madre por un gran perro San Bernarndo y, así como creo que cuidar un perro no es ser mamá, tampoco un perro puede ser la mamá de mi hija. Es solo que por momentos siento que lo haría mejor que yo.
Pero ya mañana compro la cordura.
Silvia Parque
Te estaba extrañando.
ResponderEliminarRuego a Dios que sanes pronto y vuelvas a la normalidad. Un abrazo.
¡Muchas gracias! Estoy ya totalmente recuperada. ¡Un abrazo!
EliminarA veces va bien perder un poco la cordura ;)
ResponderEliminarMe alegra saber que ya estas de recuperación.
Abrazos.
¡Es verdad! Pero solo un poco. Y con mucho cuidado cuando hay criaturas alrededor.
Eliminar¡Abrazos!
La Sertralina es mejor no dejarla. Que puedas comprarla, porque si no la depresión regresa
ResponderEliminarUn abrazo
Es verdad. En mi caso, es ansiedad: puedo llegar a sentir que me voy a romper en pedacitos, hasta quedar "pasmada", sin poder resolver o tomar acción.
Eliminar¡Abrazo!
No descuides de tu salud.
ResponderEliminarAbrazos
Gracias, Carlos. Me propongo encontrar el modo de no llegar al punto en que todo pasa al mismo tiempo, porque creo que pasa así por temporadas de sobrecarga.
EliminarAbrazos.