Hubo una breve temporada, cuando era niña, en que quise ser paleontóloga. No tenía la palabra, pero había ido a las ruinas arqueológicas de Yucatán...
Ayer fui con mi amiga Alejandra al Museo de Paleontología y al Museo del Desierto, en la ciudad de Delicias (Chihuahua). Tienen piezas impactantes: minerales y fósiles que incluyen huesos de dinosaurios. Mi preferido fue el Museo de Paleontología, pero el Museo del Desierto tiene mucha más producción, así que es muy entretenido: ahí me pareció simpático ver en exposición el tema de nuestras comidas de siempre: burritos, chile colorado, tamales, etc. Además, el Museo del Desierto tiene piezas de alfarería de Mata Ortiz que en este momento creo que son el objeto más bello que he visto en la vida... MIREN lo que dice Wikipedia.
Como son vacaciones, había niños. Me da mucho gusto oír niños decir "mira, papá, tal cosa", "mira, mamá, tal otra cosa".
Yo soy incapaz de comprender qué significan cosas como "millones de años", pero la inmensidad temporal me dejó en paz con la idea de morir :)
En el Museo del Desierto. |
Flor del desierto. |
Del Museo de Paleontología. |
Silvia Parque
Seguro que es un museo encantador.
ResponderEliminarUn abrazo, y gracias por compartir
¡Son la gran cosa!
EliminarUn abrazo :)
Hola
ResponderEliminarLa última fotográfica está genial, ese esqueleto de dinosaurios, de hace millones de años, nos hace pensar que solo somos inquilinos de este planeta de un pequeño espacio de tiempo.
Saludos
Exactamente.
EliminarSegún entendí, lo que está "colocado" es una reproducción, pero los que están en el "piso" son reales. Me costó no tocarlos.
Saludos, Carlos.
Viene bien que nos demos de vez en cuando un baño de insignificancia para recapacitar sobre lo poco importantes que somos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Esa frase habría querido tener: "un baño de insignificancia", eso mismo fue. Me vino muy bien.
EliminarUn abrazo, Macondo.