No tenía idea de que volver al blog se sentiría tanto... Recuerdo haber escrito muchas veces, de diferentes maneras, que este espacio era una "mi casa" y ahora revivo esa sensación y me sobrecoge.
En la lista de lectura, encuentro a pocos blogs. Me gustaría que estuvieran todos los que recuerdo, pero me alegra que sigan los que siguen... No sé, la verdad, cuánta gente siga leyendo por estos rumbos, pero yo quería venir a presentarles a mi criatura de palabras... El último año fue turbulento, pero llegué al 2025 "lista" para lo que seguía y lo que seguía era terminar mi libro.
Me llevó como quince años escribirlo, no porque sea la mega novela ni nada -es un relato-, sino porque me requirió un proceso psicológico complicado ser capaz de articular las ideas. Fue duro, se armó en terapia y con el apoyo de amigas entrañables. Estoy satisfecha por haberlo conseguido. Creo que es lo más importante que he hecho en mi vida -como "obra", como "cosa"- y me complace que no es, ni de lejos, perfecto. La edición tiene algunos errores -que no afectan la lectura-. Esta es la manera en la que algunas personas podemos conseguir hacer cosas muy cargadas de afectos. Me gusta
Mi enhorabuena.
ResponderEliminarUn abrazo
¡Gracias!
EliminarHola
ResponderEliminarClaro que te recuerdo, en especial el peculiar nombre de tu blog, negando la existencia de Sylvia
Feliz retorno, algunos seguimos atrincherado en la blogosfera todavía al 2025...
saludos
¡Qué bien! Me da gusto podernos saludar de nuevo. ¡Gracias y saludos!
EliminarFelicidades por haberlo conseguido!!!
ResponderEliminarAbrazo.
¡Gracias! Abrazo, Alfred.
EliminarBienvenida, de nuevo, a casa. Aunque nosotros lo hayamos pagado con tu ausencia, seguro que el resultado ha merecido la pena. Muchas felicidades por tu libro y mucha suerte con él. Es emocionante publicar un libro.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Gracias, Macondo! Me da mucho gusto reencontrarte.
EliminarY sí que es emocionante.
¡Abrazo!