El salero de mi casa no tiene una tapadera con agujeritos. Es un botecito que destapamos para tomar la sal entre los dedos y espolvorearla.
A muchos platillos, no les agrego sal; pero en los que sí la agrego, me gusta que se vea; es decir, por ejemplo, que las quesadillas tienen que llevar la sal encima, no en medio.
Bendita sal, aunque suba la tensión. Es lo sabroso del alimento y lo gracioso de la persona. Recuerdo la letra de una jota de mi tierra: De tan resalada que eres, la sal se te va cayendo. Y yo, como voy detrás, toda la voy recogiendo.
Bendita sal, aunque suba la tensión. Es lo sabroso del alimento y lo gracioso de la persona. Recuerdo la letra de una jota de mi tierra:
ResponderEliminarDe tan resalada que eres,
la sal se te va cayendo.
Y yo, como voy detrás,
toda la voy recogiendo.
Saludos.
:D ¡Qué bueno es! "De tan resalada que eres..."
ResponderEliminar¡Saludos, Macondo!