Así pasa también con otros finales, en otras cosas. Llegan para que pueda haber inicios.
Silvia Parque
miércoles, 1 de mayo de 2013
Finales
Los finales llegan por muchas razones. A veces un día laboral termina porque es la hora de salida; a veces no termina hasta que concluye la última tarea; a veces el final es independientemente de la hora y la tarea, y llega porque la persona no da más; a veces son cuestiones de la "realidad material" las que causan el final, como que van a cerrar las puertas y hay que salir. Del mismo modo caben muchas posibilidades de finalización: se termina una jornada, una quincena, un curso; se termina "mi ciclo en este lugar", dicen los que se van.
Así pasa también con otros finales, en otras cosas. Llegan para que pueda haber inicios.
Así pasa también con otros finales, en otras cosas. Llegan para que pueda haber inicios.
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Es curioso porque hay temporadas en que parece que todo tienden a acabar, aunque las situaciones no guarden ninguna relación entre sí. Un beso.
ResponderEliminarNo lo había pensado así, es cierto.
EliminarUn beso, Susana.
Son tan necesarios los finales, aunque a veces los demoremos.
ResponderEliminarUn beso.
Sí, Dana.
EliminarUn beso.
Estoy de acuerdo, lo que ocurre es que a determinada edad una ya empieza a cansarse de tanto final y tanto inicio, y tiene ganas de que algo permanezca en el tiempo, que tanto iniciar agota.
ResponderEliminarCon eso que dices me hubiera gustado finalizar la entrada, Inma... pero cuando escribo es frecuentemente algo que me digo a mí misma, y no me convenía fijarme en las "ganas de que algo permanezca en el tiempo" :)
EliminarA veces me asombra lo que coincido contigo; ya algo habíamos mencionado, pero ahora menciono que, aunque sé que esa coincidencia no es "total", de alguna forma me hace sentir confortada.