Sosteniendo lo anterior: hay dimensiones de las relaciones, construidas por el afecto, que no son "de derecho". En amor se vale decir "eres mío". No "para mí", sino "de mí".
Hizo falta históricamente -y sigue haciendo falta en algunos ámbitos, en muchos contextos-, propugnar independencias y liberaciones que permitieran a las personas su realización. Sin embargo, creo que ahora podría hacer falta, también, recordar que tenemos la opción de pertenecer, y de atrevernos a tomar a otro como "algo propio". Me refiero a formar vínculos en los que nos hacemos parte del otro, o de los otros (en pareja, en familia, en comunidad). Es posible hacerlo, respetando las identidades -evidentemente libres- de las personas. No es fácil. Es un riesgo.
Silvia Parque
Creo que pertenecrr puede ser bonito. Un beso.
ResponderEliminarSí. Y grande.
EliminarUn beso, Susana.
¿Algo así como lo que está en el poema de Sabines No es que muera de amor?
ResponderEliminar"No es que muera de amor, muero de ti.
Muero de ti, amor, de amor de ti,
de urgencia mía de mi piel de ti,
de mi alma, de ti y de mi boca
y del insoportable que yo soy sin ti.
Muero de ti y de mi, muero de ambos,
de nosotros, de ese,
desgarrado, partido,
me muero, te muero, lo morimos."
Se confunden las palabras...
Podría ser... un haber hecho propio al otro, y la ilustración de lo que puede ocurrir, porque el riesgo está. Pero creo que las ilustraciones "románticas" de estas pertenencias, algo dramáticas siempre, expresan una apropiación que es "para mí" (aunque en el caso de este poema, el juego de palabras tenga este "muero de ti"); es decir: hacer al otro mío en función de mis necesidades.- para que me complete, para sentirme en un nosotros que yo necesito. Yo pienso en un "hacer mío", como un "eres de mí", en donde hay más mirada hacia el otro, por decirlo así...
EliminarOh, palabrerías sobre lo que es de uno...del otro...nuestro.
EliminarTe entiendo... :)