sábado, 26 de noviembre de 2022

Carne

Dicen que el cuerpo va diciendo lo que le hace falta. Me ha sorprendido que tengo unas semanas queriendo-necesitando pedazos de carne de vaca. Yo siempre he sido carnívora: siempre he disfrutado la carne y  la he preferido respecto a otras cosas -ojalá mi criatura nunca se haga vegetariana-, pero mis antojos han sido, típicamente, de cosas chocolatosas o de panes-pasteles. Ahora quiero chuleta a cada rato.  Se supone que a más edad, habría que comer menos carne. Yo me regulo por economía XD ¿Por qué alguien estará necesitando proteína animal? 

Silvia Parque

martes, 15 de noviembre de 2022

Urgencias

Quería contar sobre mis clases, sobre esto y aquello, pero nada fue tan poderoso como para hacerme un espacio y traerme al blog, en medio de las muchas cosas por hacer... Hasta hoy.

Yo preparaba dulce de guayaba: agua, guayabas partidas, canela -en polvo porque no tengo entera- y piloncillo triturado. Salí de la cocina, contestaba un mensaje y oí el golpe de la olla al caer, seguido por gritos de dolor. La niña se echó encima el agua que estaría empezando a hervir.

Afortunadamente, el preparado todavía no se convertía en esa clase de líquido parecido a la miel, que se habría pegado a la piel. Afortunadamente, no le cayó en la cara, no le lastimó los ojos. Pero fue una quemadura de segundo grado. Gritó, gritó y gritó de dolor. Hace rato, después de un ratito dormida, se despertó a gritar y patalear de dolor. 

Me descuidé.

Hace días le he estado diciendo que los actos tienen consecuencias, que lo que hacemos provoca cosas y que decir "no lo vuelvo a hacer" no quita las consecuencias provocadas. 

Ojalá pudieran "quitarse" las consecuencias; pero no. 

Dijeron que tardaría unos siete días en formarse una costra. Se espera que todo esté bien, con el favor de Dios. No parece que vaya a ser sencillo...

En el caos, tratando de mojarla, "inundé" la casa. Al regresar fueron un par de horas sacando agua y el impacto de ver papeles importantes mojados. No he querido ni ver cuáles exactamente son ni cómo rescatarlos: estoy cansada. 

Silvia Parque