Yo quería tener un bebé. Quería ser mamá. Como este blog hace un poco de diario personal, puedo leer entradas viejas donde hablo de eso. Aprecio poder decirle a mi niña que fue largamente deseada, que le pedí a Dios un hijo y Él la envió. Estar embarazada es lo más increíble que me ha ocurrido y los meses en plan "solo ella y yo" fueron geniales. Creció y crecieron las dificultades, las satisfacciones, la alegría, el miedo. Me equivoqué y me porté mal con ella, más de lo que creí que podía pasar (me perdona siempre; me ama). Yo trato de honrar el privilegio de ser su mamá.
Silvia Parque
Son etapas. Ahora, con tres años, verás que esa personita se transforma en pensante, un ser que piensa y entiende. Hasta los seis más o menos, es la etapa más bonita, pero todas tienen su encanto
ResponderEliminarFelicidades para ella y para ti. Un abrazo
¡Esta niña piensa y entiende hace rato! Pero sí, ahora es capaz de tanto, que se hace muy enriquecedor convivir con ella.
Eliminar¡Muchas gracias! Abrazo, Albada.
Y lo consigues. Lo de honrar el privilegio de ser mamá, quiero decir.
ResponderEliminarMuchas felicidades a tu niña. Parece que fue ayer cuando la "estábamos" esperando.
Besos para las dos.
¡Muchas gracias, Macondo! Sí que parece que fue ayer :) :)
Eliminar¡Besos!
Qué lindo, felicidades para las dos :)
ResponderEliminar¡Besos!
¡Gracias, Eme! :)
Eliminar¡Besos!
No te culpes tanto. es lo normal. un beso
ResponderEliminarSolo me culpo en el momento; luego "lo suelto". Sé que es normal estadísiticamente que una mamá grite a un niño o que sea una ogra en un mal día; pero no es lo correcto, me aseguro de que a ella le quede claro.
EliminarUn beso, Susana. Me da gusto saludarte :)
lindas palabras...
ResponderEliminarsaludos!
Gracias, Carlos :)
Eliminar¡Saludos!