Pasé de la atención pública a la atención privada, entre otras cosas, porque necesitaba mayor información. Mi doctora es una bendición, y como suelen ofrecer los médicos en atención privada, puedo llamarle o escribirle si tengo una duda. No lo hago porque mis dudas son siempre la misma: "¿Está bien que sienta X?", siendo "X" cualquier sensación en el área abdominal. Me respondo a mí misma porque observándome desde fuera, entiendo que no hay de qué preocuparse. Pero lo que entiendo no me tranquiliza de inmediato; tarda un ratito.
Y es que yo comprendo que las personas normales se encuentran bien con la información brindada en modo persona normal a persona normal; pero para mí, cada afirmación que no es muy específica, contiene la mar de posibilidades: los calambres o similares son normales, si no duelen mucho; es normal que la panza se ponga un poco dura, si no es muy dura o por mucho tiempo. Y ¿cómo sé yo cuando algo es "muy" o "mucho"? La intensidad la descarto porque conozco mis delicadezas. Ahora puedo lidiar con la duración, porque se me ocurrió tomar el tiempo.
No vaya a dejar la impresión de que la paso mal. Voy surfeando por las novedades y estoy segura de que acabaré por adaptarme a todo, cuando la bebé haya nacido y sea tiempo de otras adaptaciones.
Silvia Parque
A mi se me ponia dura la tripa cuando necesitaba descansar. Un beso.
ResponderEliminarLa doctora me dijo que se pone dura por eso, casi siempre me pasa de noche; me asusto si se pone dura temprano y no he hecho esfuerzo físico; pero descanso, se pasa, y me doy cuenta de que no ha estado "muy dura" en realidad, y que se ha pasado rápido...
EliminarUn beso, Susana.