viernes, 8 de noviembre de 2013

Amistad

La amistad no requiere de cercanía física, pero sí de la presencia. No requiere tanto de compatibilidad como de buena voluntad, aunque se afianza a través de lo que las personas tienen en común. Me gusta que no "requiere" de mucho, que no tiene muchos ingredientes selectos mezclados en una forma precisa. Será porque la dejamos que se dé y que fluya, sin las aprehensiones con las que llegamos a vivir el amor.

Silvia Parque

12 comentarios:

  1. Suena hermoso, simple y real. Es mucho más fácil mantener relaciones amistosas que amorosas.

    Siempre me asombra, sin embargo, la dificultad que se da en construirlas: digo las amistades duraderas, las que se cuentan con los dedos ¿por qué será?

    Un abrazo!

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    1. Yo creo que no es difícil construir una amistad; creo que es raro -y por eso, muy afortundado-, pero no difícil; al contrario, creo que cuando se da, se da a veces casi sin querer, sin buscarlo, con ligereza y naturalidad. A lo mejor que no se dé a montones tiene que ver con nuestra capacidad de amar, en el sentido más amplio de la palabra, que incluya el cariño sincero de la amistad... como que a la mayoría de los humanos no se nos da sentir eso con muchos, porque al final es un vínculo donde dejamos un poquito de nosotros, y nos da pendiente ir dejando poquito de nosotros por todos lados :D solamente desvarío mientras respondo ;D es lo que se me ocurre... Si fuera como lo pienso, tal vez significa que en la relación con la persona amiga nos libramos de muchas aprehensiones que están en la relación con la persona pareja/amante, respecto a la "persona", pero algo queda de esa aprehensión respecto al hecho de nosotros relacionándolos... ¿será?
      ¡Un abrazo, Taty!

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    2. Fe de erratas: al final debería decir: "nosotros relacionándono".

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    3. :D :D :D Fe de erratas de la fe de erratas: al final debería decir "relacionándonos".

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    4. :D

      Eso sin contar que hace falta quedarse en los puertos por un tiempo, a darle tiempo al cultivo. Lo que hicieron en Waterworld es mentira, los limoneros no crecen en botes.

      Abrazos.

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    5. Completamente de acuerdo :) ¿los limoneros de verdad no crecen en botes? Yo hoy tuve esa película en mente y pensaba que cómo no habían cultivado esas plantas que crecen en pura agua, yo he visto algunas, y ahora mismo pienso que esas que he visto no dan fruto. ¿Será lo que da fruto necesita arraigarse?
      ¡Abrazos, Taty!

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  2. Me encanta! Estoy de acuerdo, la amistad no necesita esfuerzo ni voluntad, surge y se da de forma natural. Es raro, pero no difícil, Sí! No hubiera sabido explicarlo mejor.
    En el amor siempre exijimos mucho más, todo lo que aceptamos en otra persona como amiga, sin intentar cambiarlo, en el amor nos empeñamos en que cubra nuestras necesidades y expectativas.
    Besos, me ha gustado mucho esta entrada y el comentario que le haces a taty, que podría ser otra entrada más.

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    1. :) Ojalá pudiéramos vivir el amor con la desaprehensión con la que vivimos la amistad; supongo que con los años, si no completamente, si vamos dejando de querer, y sobre todo de esperar que el otro satisfaga nuestras necesidades.
      ¡Muchos besos, Inma! Es genial cómo los comentarios completan las entradas, ¿verdad?

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  3. En la amistad uno suele disentir con el otro, pelearse, pero creo que es fundamental poner las cosas en la balanza: de un lado las negativas y del otro las positivas. En ese juego veremos qué flanco pesa más.
    En el amor uno suele buscar en quien lo acompaña la perfección. Erróneamente, y hasta que comprende que no hay que idealizar, le cuesta dejarle pasar ciertas cuestiones.
    Saludos!

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    1. Creo que en la amistad ni siquiera hace uno ese balance muy en serio, como que no hay necesidad, como que naturalmente lo malo del otro pesa poco, o bien, se le deja sin mucho problema. ¡Pero, ay, en el amor! Ojalá aprendiéramos de niños a dejar en paz a quienes amamos :)
      ¡Saludos, Alan!

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  4. Estoy de acuerdo con tu visión de la amistad. Un beso

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