martes, 9 de abril de 2013

Nadie escarmienta en cabeza ajena

Hablo con una joven a punto de graduarse de su carrera, que trabaja y que es bonita físicamente. Me habla de su novio, que se enoja, que le ha dicho, que tal y tal. Le pregunto si sabe que un noviazgo no es un matrimonio, si sabe que el noviazgo es para pasarla bien. No es que el noviazgo nada más sea para eso, ni que el matrimonio sea para pasarla mal.

Silvia Parque

2 comentarios:

  1. Bueno, el noviazgo clasicamente es para conocerse, tanto lo bueno como lo malo de cada uno, y por tanto para pasarlo bien y a veces mal. Eso sí, si en el noviazgo los ratos malos superan a los buenos que nadie piense que la cosa mejorará, más vale que se lo vaya pensando, sin embargo al contrario si puede pasar, que la cosa vaya empeorando con el matrimonio, la convivencia es chula, pero jodida.
    Besos

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    1. Sí, el noviazgo tradicionalmente ha sido una etapa para conocer a la persona, pero esta forma de verlo entra en una lógica de una evolución de la pareja en la que el siguiente paso sería el matrimonio, el amasiato o el fin de la relación; visto así, el noviazgo sirve al fin de una relación posterior. Yo prefiero ver al noviazgo como fin en sí mismo, en cuyo caso, el objetivo del mismo sería el bienestar que pueda proporcionar, y no un bienestar trascendental, sino un "pasarla bien" :) en el entendido de que se genera un vínculo afectivo con la persona con quien una "la pasa bien", es que se decide acompañarle en los momentos malos, o se tolera pasar momentos malos con esa persona. Pero puesto que -desde esta perspectiva mía-, el objetivo sería disfrutar, no habría porqué esforzarse arduamente en superar los conflictos con el otro, no habría razón para luchar por trascender los conflictos debidos al modo de ser de uno de los dos (a diferencia de lo que ocurre cuando la pareja decide ser familia).
      ¡Inma, tú siempre me inspiras!

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