lunes, 14 de enero de 2013

Si no tienes nada bueno que decir...

Hoy hice un comentario poco amable... nada amable. Hice una crítica objetiva de algo que fue injusto señalar: no era relevante; la observación no era necesaria y definitivamente no fue útil.

No soy responsable de la reacción de la otra persona a la crítica, pero lamento que mis palabras fueran para mal. soy responsable de mis palabras; me doy cuenta de que necesitan mejores riendas.

Quiero que en las relaciones con las personas que me importan, primen las personas. No voy a flagelarme porque a veces mi ego no permita que sea así, para empezar porque también soy una persona que me importa; pero sí nos hemos puesto serios, mi ego y yo, le he dicho que se llama contrición.

Silvia Parque

6 comentarios:

  1. Sí, supongo que puestos a escoger, siempre es mejor pecar por omisión.
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Creo que pensar dos veces antes de hablar me funcionará... claro que Roma no se hizo en un día.
      Besos.

      Eliminar
  2. Eso nos pasa a todos, pero lo bueno es darse cuenta. Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, en mi caso, de verdad tengo intención de que pase con menos frecuencia.
      Un beso, Susana.

      Eliminar
  3. Toma mucho valor mirar hacia uno mismo, darse cuenta del error y encima hablar de ello.

    Besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eres amable, Taty.
      Lo primero -mirar hacia uno mismo- es lo más difícil.
      ¡Besos!

      Eliminar