martes, 19 de febrero de 2019

Preescolar, USAER y nuestra casa


El viernes de la semana antepasada me reuní con la maestra del grupo de B y con la maestra de USAER (el equipo que atiende a las niñas y niños con necesidades educativas especiales en las escuelas regulares). Creí que me dirían que B es tan inquieta, que se dispersa tanto y que le interesan tan poco sus pares, que lo consideraban un problema en el que había que intervenir... Y no. Sí se porta de modo que ha hecho que la observen con atención; identificaron lo que han llamado "focos amarillos" y me dieron indicaciones para trabajar en casa a fin de alcanzar metas en relación con su adaptación a la "situación escolar".

Aunque mi niña es más inquieta que sus compañeros y hay cuestiones puntuales de desarrollo que necesitamos atender, lo que más les interesaba tratar es que no avisamos a la criatura con claridad que en el kinder hay que hacer lo que toca

B ha crecido en la libertad más grande que le haya conocido a una niña cuidada (no conozco tantísimas niñas, pero lo afirmo a partir de lo que veo a mi alrededor). Le limito la comida chatarra y el entretenimiento pasivo, pero nos conducimos con la seria intención de respetar su voluntad, así que siempre hay una razón para lo que se le indica. Viviendo así, es un choque cultural llegar a un sitio donde "ahora hay que sentarse y pintar este dibujo". Aunque le guste pintar. 

¡Y luego está la dinámica de "premios"! En casa tratamos de educar en relación con las consecuencias directas o lógicas de su conducta y aunque no nos sale perfecto, es como ha aprendido que son las cosas. En la escuela es diferente.

Bueno: pues hablamos mucho con ella ese fin de semana. Le explicamos cómo era en la escuela, cómo es en la casa y cómo lo vamos a manejar. 

Es increíblemente satisfactorio lograr comunicarte con una niña todavía de tres años. 

Seguimos casi todas las indicaciones que nos dieron. Buscamos sin éxito unas tijeras especiales. No me he dado el tiempo de bajar de internet unos dibujos que habría que imprimir para tener señales ilustradas de la rutina en casa. Y lo más difícil: no estamos dándole espacios de convivencia con otras niñas y niños (además del kinder); pero ya estoy fraguando una estrategia.

Me gustaría poder llevarla a una escuela con un modelo educativo coincidente con la "epistemología" de su educación en casa; pero no se puede y la verdad es que en su escuela lo hacen requetebien. Estoy muy contenta con la atención que le ponen. Yendo a lo más "material": sé cuánto puede costar llevar a la niña con una psicóloga a que nos diga  lo que nos están diciendo.

La maestra de USAER se encargó de dejar muy claro que B no estaba en la mira de recibir atención con el equipo (trabajan con quienes lo necesitan, desde segundo, no desde primero), que solo les parecía que estábamos justo en el momento de atender los "focos amarillos" para no tener problemas después. Lo dijo varias veces, como para tranquilizarme, como si me fuera a preocupar la etiqueta "USAER" que viene aparejado con "necesidades especiales". Y yo al contrario: entre más recursos estén puestos al servicio del bienestar de B, mejor.

Con las criaturas es bien importante esa mirada externa que revela lo que ocultan los escotomas familiares. También es importante echar mano de lo que existe: escuchar a los que saben para aprovechar lo que pueden aportar.

Silvia Parque

12 comentarios:

  1. Es una tranquilidad saber que está en buenas manos.
    ¡Qué garbo tiene la chamaquita!

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  2. me alegro que todo vaya encaminado sea con el método que sea... siempre es lindo leer esto.... saludos a las dos!!

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  3. Los niños se adaptan perfectamente al ambiente del cole, siempre y cuando el cole tenga herramientas para facilitar el paso de la casa a la socialización.

    Qué bien que haya un equipo que detecte posibles dificultades antes de que éstas puedan ser un problema. Un abrazo

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    1. Nos han dicho que normalmente pasa en los primeros dos meses, que han pasado seis y B no se adapta todavía; yo creo que más bien no se "adecua", pero me gusta que no lo vean como si la niña estuviera defectuosa o descompuesta, sino como algo que ha sucedido por obra de algunos factores sobre los que podemos intervenir.
      ¡Un abrazo, Albada!

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  4. Mi experiencia con dos hijas jóvenes (22 y 19 años) es que nada sale como son los proyectos que tenemos con ellos cuando son pequeños. Tenemos muchas ideas, podemos idear una educación de tal o cual forma, prepararles de tal manera, fomentar tal o cual cosa, pero los hijos no salen como hemos previsto. La fórmula más convincente que he leído es la de un libro que se titula "El mito de la educación" y que se reduce a "los hijos salen como salen". Una minuciosa planificación de su educación no valdrá mucho al lado de las relaciones de amistad que trence en sus años de niñez, adolescencia, juventud que serán más importantes que todo lo que les hayamos enseñado, esto unido a la influencia de época que está en el aire: Podemos leer cuentos todas las noches, que vean que se lee en casa continuamente, y nuestros hijos pueden salir totalmente refractarios a la lectura y no leer nada. Ver buen cine cuando son pequeños y que luego solo vean malas series de consumo barato. Todos nuestros planes son ilusorios: los hijos tienen o tendrán su propio proyecto entre los cuales evidentemente es matar al padre o a la madre moralmente. Saludos.

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    1. :D Pues sí, Joselu. Es verdad. Sostengo que los hijos no son proyectos, así que las expectativas no son buenas consejeras. El papá de B y yo solíamos bromear con que nos saliera monja o soldada XD Sin embargo, está visto que hacer unas cosas provoca unos efectos y hacer otras provoca otros (en el presente o en el futuro inmediato) y pues hay que tratar de hacer más lo que provoca los efectos que queremos.
      Leo a una mujer increíble que publicó hace tiempo que a lo que aspiraba con su hija (todavía una niña) es a formarla de tal modo que pudiera reclamarle lo que habrá que reclamar, cuando llegue a la adolescencia.
      ¡Saludos, Joselu! Gracias por compartir. Siempre me enriquece la experiencia de otros papás o mamás.

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  5. Como dices, mientras más recursos hay, mejor.
    En eso estamos siempre al debe.
    Encuentro que la escolaridad ahora es lejos mejor a la que tuvimos, incluso Chile con todas sus debilidades ha avanzado mucho, en especial los primeros años.
    Que tenga B. un año espectacular en el cole.
    Eso te hará feliz.

    (De mi escolaridad recuerdo que alguna vez yo fui a la reunión de apoderados a recibir mis notas, mamá tema de su trabajo...ay, eran otros tiempos)

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    1. ¿Verdad que si?
      Estoy de acuerdo contigo: ahora es mucho mejor que antes en varios aspectos, sobre todo en preescolar. En los grados superiores, no lo creo; excepto la cuestión de la inclusión que al menos por acá, aunque las cosas se hayan hecho de una manera que deja mucho que desear, al menos queda caro que a todas y todos les corresponde un espacio en la escuela.
      ¡Muchas gracias por tus buenos deseos! Cuando la llevo y va caminando contenta, hablando sola, riéndose, me llena el alma... Quisiera encontrarla, a la salida, igual de contenta; espero que luego...
      Te hiciste una niña capaz, Ojo humano, seguro fue porque la necesidad de hacer lo que había que hacer, estuvo arropada con amor.

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  6. Yo también veo una suerte y algo que agradecer el que haya equipos especializados que atiendan a los niños en todas sus distintas necesidades. No puedo comprender que haya padres que se traumaticen porque a sus hijos le saquen a logopedia o a lo que sea que necesiten.

    Creo que tu pequeña enseguida va entender que en el colegio hay unas normas y hay unas rutinas, las cosas se hacen de una manera, en casa de otra. Es que es muy pequeñita todavía. A veces quieren que asuma las cosas demasiado rápido.

    Un beso fuerte

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    1. ¿Verdad, Matt? Es una fortuna contar con recursos y los recursos en cuanto a personal capacitado y programas son muy valiosos. Sí entiendo que hay generaciones para las cuales, requerir o beneficiarse de una atención especial representaba una etiqueta que les costaba caro; pero ahora no tiene porqué ser así.
      Que tengas boca de profeta. Yo creo que comprende extraordinariamente cuando se le explica, pero que necesita un tiempo y si ese tiempo es mayor que el de otros niños, pues así es :)
      ¡Un beso fuerte, con mucho gusto de leerte, en tu blog y acá!

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