jueves, 1 de mayo de 2014

Fe secular / seguir la ruta

Creo que las personas, en general, necesitamos más "fe secular": convencimiento sobre un asunto, que nos lleve a actuar conforme a tal convencimiento.

Me gusta cómo Popper, en la introducción a Conjeturas y Refutaciones, asienta que el origen de buena parte de nuestros conocimientos, no está en la experiencia ni en la razón. No somos nosotros mismos quienes creamos conocimiento sobre diversos objetos, por lo cual cobra importancia la confianza que pueda tenerse en una fuente de información.

La fe es la certeza de lo que no se puede ver, y a menudo no podemos "ver" los efectos de muchísimas cosas, ni a corto ni a mediano plazo. Es verdad que el médico debe explicar a su paciente con la mayor claridad posible, qué es lo que está pasando y cuáles son las alternativas al respecto; ojalá nuestros sistemas educativos nos llevaran a ser pacientes con una formación que permitiera comprender lo que oímos de cualquier profesional. Pero incluso si así fuera, con el médico más claro y el paciente mejor formado, algo se necesita de fe, para dejarse en manos del otro, y hacer cosas como tomar veneno para aliviar. Así, los papás reciben del psicólogo de sus hijos, propuestas con estrategias que van contra el "sentido común", pero que son lo que va a cambiar la situación problemática que atraviesan. Les es necesario tomar lo que se va a sentir arriesgado, en apego a la confianza de que el otro sabe lo que hace, y habiendo advertido que lo hecho por su cuenta no ha funcionado. Que una dieta para adelgazar, funcione, tiene que ver con seguirla una semana y otra, y otra, aunque no se vean resultados para llamar la atención; hay que creer que finalmente, van a estar ahí los resultados. A menudo se habla de falta de persistencia, pero yo creo que se trata de falta de fe en la ruta que elegimos para llegar a nuestros objetivos.

Creo en los sistemas programáticos; creo en los planes con estrategia. Funcionan aunque no sean el mejor sistema o el mejor plan. Si a la mayor parte de la gente no le funcionan, es porque la mayor parte de la gente no nos apegamos a la ruta que trazamos. Es importante hacer pausas en el camino, para reconsiderar lo que haya que reconsiderar, a la luz de la experiencia ganada y de los posibles cambios de situación; pero si se cambia de ruta todo el tiempo, no se llega a ningún lado.

Silvia Parque

4 comentarios:

  1. Yo tengo un problema con eso, tengo falta de fe en general, lo que me lleva a la falta de constancia, me gustan los resultados rápidos y muchas veces eso no es posible.
    Con cualquier estrategia que vaya en contra del sentido común más todavía, necesito encontrarle la lógica a todo, y si no la veo no puedo seguir.
    Besitos

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    Respuestas
    1. Creo que tanto la falta de fe como la necesidad de resultados rápidos, son un problema endémico.
      Por otra parte, creo que la fe es lo que puede dar la mejor combinación entre buenos y rápidos resultados -esta fe de la que hablo en la entrada; sobre la fe en Dios o en uno mismo, pienso igual, pero eso es otra historia-. Creo que todo tiene "su" lógica, pero no tiene que ser la lógica simbólica; hay lógicas muy complejas, está la lógica difusa, y donde se dice que el caos no hace posible la lógica, yo creo que más bien hay "lógica del caos", muy complicada para un humano... el caso es, en lo concreto y práctico, siguiendo mi ejemplo del psicólogo con los papás, si al profesional sus seis años de formación le alcanzan para tener una idea que funciona, pero no para explicarle al otro la lógica de la misma (que él pudo tardar esos seis años en entender), ¿por esa deficiencia del profesional, se van a privar los usuarios, de lo que les puede beneficiar?
      También, por otra parte, podríamos hacernos más sensibles a las pequeñas señales, a veces muy pequeñas, de que algo va por buen camino...
      ¡Besitos, Inma!

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  2. Yo soy de seguir el plan trazado aunque a veces me tome mi tiempo. Un beso.

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