Aprendí que a las plantas hay que dejarlas en un sitio, ellas se acomodan al lugar donde se les puso, y si se les mueve a cada rato, no pueden acomodarse en paz. Con las salvedades evidentes, también nos pasa a las personas.
Pues no se me habría ocurrido pensarlo, pero es cierto, pobres plantas, si a mí me hicieran eso me moriría de ansiedad, con lo que yo necesito mis rutinas y "mi" sitio. Besitos
Resulta que estuve fastidiando a mis plantas como por un mes. Conforme la tarde iba avanzando, yo las movía para que fueran ocupando la franja de luz que se marcaba en el suelo de la habitación, ¡pobres!, yo creía que las estaba tratando muy bien.
Buen punto! Y a las personas, mientras más acrecentadas en edad, más difícil cambiarles sus rutinas, sus lugares comunes y demás, jeje.
ResponderEliminarSaludos!
Sí :) creo que cambiar es imprescindible, pero no como molinillos ;)
EliminarPues no se me habría ocurrido pensarlo, pero es cierto, pobres plantas, si a mí me hicieran eso me moriría de ansiedad, con lo que yo necesito mis rutinas y "mi" sitio.
ResponderEliminarBesitos
Resulta que estuve fastidiando a mis plantas como por un mes. Conforme la tarde iba avanzando, yo las movía para que fueran ocupando la franja de luz que se marcaba en el suelo de la habitación, ¡pobres!, yo creía que las estaba tratando muy bien.
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