Entre el recalentado de Navidad y la cena de Año Nuevo, es muy recomendable un par de días de moderación, privilegiando el alimento vegetal, y con agua en abundancia. Un poquito de movimiento para que el cuerpo no crea que está viviendo algo normal, y ya se verá en enero lo que haya que hacer. Es de mala educación preocuparse en diciembre.
Silvia Parque
La verdad es que sí... Si se sigue como yo ahora mismo, sentado en sofá durante horas y horas, estos manjares tan exquisitos y apetecibles se van a postrar en las caderas y en el culo... Y esto no puede ser... Esta tarde me pongo a hacer ejercicio. ¡LO PROMETO!
ResponderEliminarA mí se me quedan los excesos en los muslos y en el vientre :S como estoy trabajando en un proyecto que me ocupa todo el día -sentada-, la verdad es que apenas estiro y flexiono para evitar oxidarme, ¡pero tus mayúsculas me motivan! Hoy le pongo ánimo, música, y hago ejercicio de verdad :)
Eliminar